Los datos satelitales no son infalibles. Las señales GPS se ven afectadas en su camino por la atmósfera, objetos e inexactitudes en las órbitas de los satélites. La corrección GPS asegura que tu posición sea exacta. En esta página lees cómo funcionan las correcciones y por qué son esenciales para aplicaciones donde la precisión cuenta.
El GPS tiene retrasos y desviaciones. La corrección elimina estos errores para una determinación de posición fiable y estable.
Los satélites emiten señales que en su camino hacia la Tierra pueden desviarse. Piensa en retrasos por la ionosfera o en efectos multipath por reflexiones. Eso provoca imprecisiones de hasta 10 metros. Para uso recreativo no hay problema, pero en sectores como la construcción, la agricultura o la movilidad, eso es sencillamente demasiado. La corrección GPS reduce esa desviación a solo centímetros.
Un punto fijo compara las señales GPS y envía información de corrección en tiempo real a tu receptor.
Un sistema de corrección utiliza una estación de referencia en una ubicación conocida. Esta estación sabe exactamente dónde está y compara esa posición fija con lo que el GPS “cree”. La diferencia se transmite como señal de corrección. Los receptores utilizan estos datos para ajustar su ubicación de forma instantánea. Esto puede hacerse mediante una base RTK propia, pero también a través de una red de puntos de referencia fijos.
La corrección GPS abre la puerta a una precisión sin precedentes, para procesos de trabajo donde cada centímetro cuenta.
Sin corrección: inexacto. Con corrección: precisión centimétrica. Esa es la diferencia que hace posible RTK.
El GPS sin procesar es adecuado para la navegación en la autopista. Pero para máquinas automáticas, drones o mediciones no es suficiente. La corrección GPS es esencial si quieres saber exactamente dónde estás — no aproximadamente. Y con una red robusta como RTKsub obtienes esas correcciones de manera continua, sin interrupciones.
Necesitas un receptor GPS, una fuente de corrección y una conexión para ajustar en tiempo real.
Para utilizar la corrección GPS necesitas tres cosas: un receptor capaz de procesar correcciones, una fuente (como una red RTK o estación base) y una conexión fiable entre ambos. A menudo esto se hace a través de internet móvil (NTRIP) o radio. Con ello puedes corregir tu posición en tiempo real.